Los desarrolladores de nuevos productos de alimentación tienen en cuenta un factor clave hoy por hoy, la sostenibilidad. Y para ello, la industria del packaging tiene un papel fundamental. Las empresas han de buscar soluciones sostenibles que respondan a la preocupación actual de los consumidores por el medio ambiente.
Diversos estudios mencionan que el packaging es considerado por el 96% de las marcas una pieza estratégica para mejorar sus resultados empresariales. Más aun, si contamos con el efecto sostenible, ya que hoy en día los consumidores le dedican una atención muy importante a los materiales utilizados en el packaging de los diversos productos que se compran y consumen. Si estos productos están hechos con materiales no dañinos para el medio ambiente, se verán altamente beneficiados a través del consumo por parte de los consumidores.
El sector del packaging es innovador y sostenible en el que el diseño y la producción han de aportar su granito de arena para poder reducir los residuos de envases, a través de la prevención, reutilización y reciclado. Si se tienen en cuenta estos aspectos se puede contribuir en reducir las emisiones de gases y la dependencia de combustibles fósiles.
Como se puede apreciar, actualmente, la preocupación por la sostenibilidad ha aumentado en todos los países, sobre todo en los millenials, siendo el sector de la alimentación quien ha introducido más mejoras. Por tanto, el sector del packaging debe estar concienciado para adaptarse a los tiempos actuales y a la exigencia de los consumidores ya que son un público mucho más exigente y concienciado con los temas relacionados con la sostenibilidad y el medio ambiente.
Podríamos decir que dentro del sector hay tres pilares que podríamos desarrollar para poder seguir avanzando en términos de sostenibilidad. Estos tres pilares serían, el diseño, los materiales y el embalaje. Con el diseño del packaging podremos buscar soluciones innovadoras y sostenibles. Los materiales utilizados para el packaging son fundamentales para poder reciclarlos y hacer que entren en la economía circular. Y el embalaje de los productos es fundamental para poder ofrecer un uso correcto de los materiales que componen el embalado.
